El municipio contaba con 760 habitantes, 386 edificios habitados (uno de ellos solo estaba ocupado a temporadas) y 228 edificios inhabitados (casetas de era, palomares, etc.). Estaba formado, como en la actualidad, por la misma Quintanilla y los agregados de Portillejo, Velillas del Duque, Villantodrigo, Villaproviano y Villarmienzo.
De los varios centenares de casas del término municipal, 71 correspondían al pueblo de Quintanilla. Sobre el caserío quintanillense, la iglesia parroquial de San Andrés descataba por ser “un edificio tan sólido como capaz… es de aspecto bastante agradable”.
Organización administrativa
Pertenecía a la actual provincia de Palencia desde 1833 y formaba parte del partido y distrito de Saldaña desde 1834 para la administración de Justicia y para la elección de diputados provinciales y a Cortes.
Su parroquia, igual que las parroquias de sus agregados, pertenecía al arciprestazgo de Loma de Saldaña, en la diócesis de León. El curato de la parroquia quintanillense era “de primer ascenso”.
Quintanilla estaba comprendida, para la administración militar, en el Gobierno Militar de Palencia (Capitanía General de Castilla la Vieja).
Actividades económicas
La principal actividad económica era la agroganadera. Las producciones consistían en trigo, cebada, vino, aceite de linaza, legumbres, frutas, hortalizas y pastos. La zona de pastizal mantenía un buen número de cabezas de ganado lanar, vacuno, cabrío, porcino y el necesario para las faenas agrícolas. Estas actividades se complementaban, para la alimentación, con lo que daba la caza y la existencia de monte.
Algunos habitantes ejercían “todas aquellas profesiones y oficios mecánicos de mayor necesidad”.
El pueblo de Quintanilla contaba con un establecimiento comercial “para la venta de los artículos necesarios”.
Escuela
El pueblo contaba con una escuela “sostenida de los fondos del municipio… para los dos sexos, perfectamente atendida y a la que asisten unos 20 niños e igual número de niñas”. El total del presupuesto municipal con el contaba el ayuntamiento era, nivelados gastos e ingresos, de 4.097 pesetas para el ejercicio 1885-1886.
Otros servicios
El vecindario estaba bien “abastecido de aguas para todos los usos” y contaba con un clima “bastante sano”.
Para las comunicaciones con los pueblos limítrofes, Quintanilla contaba con una red de caminos vecinales “en regular estado de conservación”. La correspondencia se expedía por la línea Madrid-Santander (estación de Frómista) y la estafeta de Saldaña.
Por Carlos Pérez
